Madrid recupera uno de sus museos más emblemáticos

El Museo Arqueológico Nacional (MAN) renace seis años después convertido en la mejor representación museística de la historia de España «que nos permite conocer a través de sus bienes lo que fuimos, somos y seremos», afirmó el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, en la presentación del museo.

Las cifras que rodean la reforma integral, que han afectado tanto a la arquitectura interior del edificio como al diseño museográfico, son un reflejo de la magnitud del proyecto.

Más de 65 millones de euros de inversión, una cantidad respetable pero «bastante ajustada» según el ministro, y un incremento en la superficie del 13 %, al pasar de 19.280 metros cuadrados a 23.303 metros cuadrados «son cifras expresivas de la complejidad del proyecto», destacó Wert.

El incremento mayor, de un 30,3 %, se ha producido en la superficie expositiva en que 10.000 metros cuadrados han sido divididos en 40 salas que exhiben 13.000 objetos, «que permiten el mejor paseo imaginable por la Historia de España a través de lo mejor de los bienes arqueológicos del país».

Desde la Prehistoria hasta Grecia, la Hispania romana, la época medieval, la Edad Moderna, Oriente Próximo o Egipto, el recorrido pone en valor a la Dama de Elche, uno de los principales atractivos del museo, la Dama de Baza, el Sepulcro de Pozo Moro, el Tesoro de Guarrazar, el Orante de Gudea, el Crucifijo de Fernando y Sancha, momias y sarcófagos egipcios o la esfinge de Agost.